El día ha amanecido frío, pero precioso. El sol lucía y el cielo estaba completamente azul. Me apetecía salir con la cámara al jardín de casa e intentar hacer algunas fotos. La verdad es que en invierno no está en su mejor momento... En primavera empieza a renacer y en verano está espectacular.
Aún así, tenemos algunas flores, que aportan pequeños toques de color al jardín. Por ejemplo, la buganvilla fucsia, me encanta...
O el pacífico, cuya flor tiene un color que varía a lo largo del día, del coral al salmón, según la luz que reciba. Ahora mismo, tiene un tono asalmonado, ya que se encuentra en una zona de sombra.
Por último, he hecho una foto a la adelfa blanca que tenemos en la parte de atrás de la casa. Cuando he subido las fotos, me he dado cuenta que las flores tienen unas pequeñas manchas...
Y como eran las dos de la tarde, y se estaba de maravilla fuera, hemos improvisado un sencillo aperitivo para disfrutar un rato más de este precioso día.
Bueno, ¿que os ha parecido "mi reportaje" del jardín? Ya sé que tengo mucho, muchísimo que aprender, pero como disfruto con la cámara...
Hasta la próxima entrada, un beso.